Alcatrazz es una banda de culto, creada tras la separación de su vocalista fundador de Rainbow y que ha sirvió para catapultar a principios de los 80´s a unos jóvenes y virtuosos guitarristas llamados Yngwie Malmsteen y Steve Vai. Se celebra su regreso con este nuevo disco de estudio que representa el surgimiento de la banda después de 34 años, ya que no han logrado grabar un álbum desde 1986. Ahora, en un controvertido 2020, “Born Innocent” es lanzado después de algunos intentos parciales de la banda por volver desde que Graham Bonnet reactivó el nombre en 2006 para una gira por el Lejano Oriente.
Quizá sea uno de los vocalistas más subestimados, pero Graham Bonnet es una figura importante, fue el hombre cuya falta de cabello largo una vez lo marcó como una elección controvertida como líder de Rainbow. Aunque no se le noten, ahora tiene 72 años, pero con una energía de veinteañero con la que ha logrado recrear el poderoso sonido de Alcatrazz en un disco, esta vez sin el toque pop de los 80 requerido en aquel entonces para sonar en la radio. “Born Innocent” más bien es un LP entre el hard rock melódico y el heavy metal neoclásico… si! Neoclásico, gracias al guitarrista shredder Joe Stump, quien hizo un gran trabajo.
«Born Innocent» es muy metal, aunque con los curiosos temas líricos de Bonnet que le dan al sonido un toque refrescante e idiosincrásico. La mejor canción del disco es “Polar Bear”, impulsada por un ritmo galopante al estilo Iron Maiden, con guitarras veloces, armonías sinfónicas y sintetizadores que se escuchan sobre voleas de bombo doble, mientras escuchamos la historia de un anciano que se va al desierto para sentarse y esperar la muerte, momento en el que el oso lo ‘llevará a donde nacerá de nuevo’.
“London 1666” presenta la mezcla exitosa del atronador power metal con cuentos de hadas, con riffs llenos de ingenio, solos a lo Malmsteen y teclados que dibujan atmósferas, mientras que Bonnet canta con autoridad invitando a ‘tomar lo que podamos y huir de las llamas’ en medio del pánico que tiene sumido a Londres. Las baterías suenan duro y retumban como nunca se escuchó en los registros del grupo.
Recuerdo nuevamente que Alcatrazz una vez incluyó (por separado) a Yngwie Malmsteen y Steve Vai, y que en vivo tocan temas de Rainbow compuestos por Blackmore. Es por ello que además del excelente trabajo de Joe Stump, han invitado a otros guitarristas de altura como el japonés Nozumu Wakai quien se hace sentir en el track “Finn McCool” una canción épica escrita en torno a un mito del guerrero irlandés. El fallecido Bob Kulick se luce en “I Am The King”, y el thrasher canadiense Jeff Waters de Annihilator destroza maniáticamente los riffs en “Paper Flags”, quizá la pista más pesada de toda la obra. Otro maestro neoclásico, Chris Impellittieri dejó huella con sus notas y su guitarra en “Born Innocent”.
Energía sin aliento y malabares guitarreros también caracterizan a “Dirty Like The City”, escrito por Steve Vai, aunque no la grabó, sin embargo Stump la supo interpretar. En total, tenemos un disco que exuda una cantidad francamente indecente de vitalidad, vigor y una composición aguda de hombres demasiado mayores pero que todavía tienen mucho que ofrecer. Graham Bonnet y su grupo están de vuelta y ojalá que sea por mucho tiempo, esperemos que la pandemia pase para poder verlos girar. Por ahora “Born Innocent” está en el top 5 de los mejores discos de classic rock – hard rock de 2020.
