Para Melanie De Toni
Ella se encontró con la nieve por primera vez y fue un abrazo sutil: fuego y hielo se fundieron en un horizonte de sensualidad. Ella se incorporó al paisaje y confundía a quienes miraban el cuadro realista que acaparaba la primera plana. Minutos después se produjo un resplandor porque el sol se reflejó en el manto nevado… cuando pasó el destello se había derretido buena parte de la nieve y el agua que manaba sabía a placer. ¿Qué sucedió? Ella se desnudó y con su provocadora estampa generó el calor que derritió la nevada… desde otro lugar, quien la miraba en forma desapercibida quiso bañarse con ese nuevo líquido…