Uno de los festivales más emblemáticos del Reino Unido se estrenó en suelo madrileño  con una producción impecable en un espacio de eventos al aire libre llamado La Caja Mágica, ubicado al sur de Madrid, el cual puede albergar cómodamente cuatro tarimas gigantes, y llegar de un extremo a otro no toma más de 10 minutos –o menos si no estás completamente borracho–. Una amplia zona de restauración albergó un sinfín de puestos de comida rápida y food trucks que satisficieron el paladar de más de 150 mil personas a lo largo de tres días de rock.

Comida árabe, hindú, argentina, venezolana, española, italiana y norteamericana son algunos de los menús que se hicieron disponibles a precios accesibles. También contó con una zona de venta de ropa rock, más de diez stands ofrecían una variedad única en un festival único. El sistema de compras estaba basado en el cambio de euros por moneda del festival, billetes con la mascota del festival de diferentes denominaciones y “monedas” en forma de pajuelas con diferentes nombres de bandas del cartel hacían que el Download fuese toda una experiencia.

Asistimos el último día del festival, los dos días anteriores se habían presentado Linkin Park, System of a Down, The Cult, Mastodon, Opeth, Dark Tranquillity, Brujería, Monster Magnet, Gojira, solo por mencionar algunas de las bandas que ocupaban las cuatro tarimas que funcionaban diariamente. Entrando al recinto, fuimos al Main Stage 1 a ver a Iced Earth, presentando su último disco Incorruptible,  un sonido impecable y performance profesional, “Seven Headed Whore”, “Dystopia” y “My Own Savior” fueron algunos de los temas  que se pudieron apreciar, el público quedó satisfecho. En el Main Stage 2 la banda noruega Kvelertak estaba en tarima, presentando su último disco Nattesferd, una propuesta interesante, recuerda a Inmortal, Refused, Rush y Van Halen, contundentes y con muchos fans haciendo pogo en las canciones.

En el Stage 3 nos conseguimos con Phil Campbell and The Bastard Sons, la propuesta del ex Motorhead no se aleja mucho del sonido característico de la banda que le dio la fama. Tiene matices modernos los cuales hacen que el fan acérrimo de Lemmy le cueste digerirlo, pero los más abiertos de mente le aplaudimos. Su cantante, Neil Starr, el único que no es su hijo, supo hacer muy bien los covers de Motorhead, como “Going to Brazil” o  “Born to Raise Hell” que fueron el punto alto de la presentación. Corriendo al Main Stage 1, In Flames ya hacía estragos  y la gente empezaba a pogear con mucha más fuerza, canciones del Battles fueron muy bien recibidas por el público, aunque Anders se disculpaba por “playing disco shit”, los fans hardcore de la banda agradecieron la sinceridad; cerraron con “Take this Life”, la de mayor recepción de la noche.

Entrando la noche, una de las bandas más esperadas de la noche se sube al Main Stage 2, Ministry, Al Jourgensen y compañía empiezan con “Filth Pig” y no paran de tocar, “Lies Lies Lies”, “Señor Peligro” tuvieron unas visuales contestatarias contra el stablishment norteamericano y la dictadura venezolana respectivamente. “Thives”, “So What”, “N.W.O” y “Just One Fix” son algunos de los temas que hicieron que el público se volviese loco. Sonido impecable, un directo brutal, Ministry se sigue consagrando como los reyes del metal industrial. Le toca el turno a Prophets Of Rage como cabezas del cartel en el Main Stage 1, a puño alzado tal cual pantera negra reciben al público y comienzan con el cover de Public Enemy  que le da nombre a la banda, “Testify”, “Bombtrack”, “Killing in the Name of” son algunas de las canciones de R.A.T.M que son coreadas por el público a mas no poder, la original “Unfuck the World” y los covers de Cypress Hill hacen de este show una verdadera fiesta. Chuck D y B-Real hacen lo mejor posible para llenar los zapatos de Zack de la Rocha, pero  se siente que falta el verdadero Rage.

Suicidal Tendencies se apodera del Main Stage 3, Mike Muir y compañía empiezan a destruir con su trash crossover promocionando su último disco World Gone Mad; introduciendo a la banda, el público se vuelve loco cuando Dave Lombardo aparece detrás de la batería. “You Can Bring me Down”, “Freedom” “War Inside my Head” y el cover de Cyco Myco  “I Lost My Brain” son algunos temas del set list de la noche, un sonido increíble, un directo completamente impecable y lleno de energía. Nofx son los encargados de cerrar el Main Stage 2, Fat Mike y compañía suben al escenario para interpretar canciones clásicas como “Linoleum”, “Idiots are Taking Over” y “Bob”; entre canciones bromean con los asistentes, “Radio”, el cover de Rancid, es coreado a mas no poder y cerraron con el clásico “Don´t Call me White” con un pogo gigante. Un concierto divertido que a veces no sonaba tan bien gracias a las dificultades que Melvin tuvo con su guitarra, pero es punk rock y realmente a nadie le importó.

Corresponsal: Alejandro Castro
Fotógrafo: Jorge Allende

 Madrid – España