Inspiraciones literarias en tiempos de aislamiento. Decenas de personas participaron en esta iniciativa literaria del club, que contó con un jurado integrado por Ricardo Adrianza, Eritza Liendo y Tibisay Guerra
En estos tiempos de confinamiento ocasionado por la pandemia de Covid-19, hay quienes aprovechan el tiempo para hacer ejercicios, otros se dedican a perfeccionar su ámbito culinario y hay quienes eligen la pluma o el teclado de una computadora para inspirarse y plasmar escritos.
Por esta razón, y como una manera de mantener unidos a los socios y brindarles actividades de distracción, el Valle Arriba Athletic Club (VAAC) ideó el concurso de Cartas de Amor 2020, que contó con la asistencia de decenas de socios interesados en el mundo literario, quienes participaron plasmando historias y poemas.
Del total de personas participantes, el jurado seleccionó a 8 ganadores que fueron Valentina Ramírez, Andrés Troconis, Francis Gómez, Rubén Rodríguez, Ricardo Szemat, Andrés Applewhite, Alfonso Ortega y Alfredo Morisaki.
Ramírez, quien es psicopedagoga y labora en el VAAC, escribió bajo el pseudónimo “Paty”, su experiencia de la creación del preescolar Colorín Colorado. “Conté los buenos momentos que pasé allí y la satisfacciones alcanzadas, antes de tener que cerrarlo porque mi hermana se iba del país”, apuntó.
Andrés Troconis, se alzó con el segundo lugar. “Me inspiré en mis experiencias de la niñez en el cerro El Ávila. Quería transmitir esperanza, buena energía y muchas ganas de seguir viviendo”, aseveró el abogado, quien uso el pseudónimo “Capín Melao”.
Tanto Ramírez como Troconis manifestaron su sorpresa de resultar ganadores en el concurso, al tiempo que les pareció una excelente idea del club propiciar esta actividad, como una buena iniciativa para fomentar la cultura literaria entre la comunidad de socios.
Troconis agregó que “las cartas de este año estuvieron excelentes” y exhortó al club a mantener este concurso y a retomar la experiencia del de las cartas al Niño Jesús, evento que se realizó unos años atrás y que también fue motivo de concentrar energías y buena vibra entre la comunidad del VAAC.
Un jurado de lujo
El jurado del concurso estuvo integrado por Ricardo Adrianza, columnista de El Estímulo, y autor del libro “Cartas a Matías. Lecciones de vida para mi nieto”; Eritza Liendo, profesora universitaria, columnista, hacedora de emociones culinarias y autora de los libros “Cambios de Último Momento” y de “Shadow y otros cuentos sombríos”, galardonado con el Premio Autores Inéditos de Monte Ávila (2013).
La tercera jurado fue Tibisay Guerra, promotora cultural y literaria, creadora de la plataforma Autores Venezolanos, vitrina para jóvenes y noveles escritores del país, y organizadora del Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas.
Adrianza señaló que este evento “fue una bonita iniciativa del VAAC, que debería mantenerse en el tiempo”. Señaló que las decenas de personas que participaron lograron en su mayoría “transmitir emociones”.
Afirmó que escribir durante el confinamiento “es una manera de drenar sentimientos y te ayuda a despegarte de la situación. Cuando uno acepta lo que siente le das espacio a manifestar cosas más creativas y a estar más presente, es decir, a potenciar las emociones positivas”.
“No podemos cambiar lo que está pasando con la pandemia, pero sí lo que pensamos y lo que sentimos, por lo que escribir nos pone a ganar la batalla frente a la incertidumbre y el estrés de estar encerrado. Por eso, felicito al VAAC por esta iniciativa, esperando perdure en el tiempo”, expresó.