Los fans de Linkin Park y del rock de los 90’ en general continúan haciéndose la siguiente pregunta: ¿El suicidio del Chester Bennington tendría relación con el de su amigo Chris Cornell? Y vaya que tiene fundamentos esta interrogante. Cornell se quitó la vida el 18 de mayo de 2017 y. Bennington, también hizo lo mismo estableciendo otra una coincidencia que hiela la sangre: el cantante de Linkin Park decidió poner fin a su existencia justo el día que Cornell nació, un 20 de julio; es decir quiso ir a festejar el cumpleaños de su amigo en otro plano terrenal; las coincidencias no existen, todo tiene un motivo o una explicación.
Además, Mike Shinoda, tecladista y guitarrista de Linkin Park recordó que Chester dedicó a Chris la canción ‘One More Light’ y la interpretó durante su funeral. La letra final del tema parece ser trágicamente premonitoria, porque la última frase expresa lo siguiente: “¿A quién le importa si una luz más se apaga? Pues a mí me importa”… Duras palabras… ¿crónica de una muerte anunciada? Ambos tomaron la opción de ahorcarse haciendo aún más mórbido el análisis.
Pero Shinoda también explicó lo afectado que estaba Bennington con la muerte de Cornell: “Cuando estábamos haciendo la prueba de sonido, Chester ni siquiera podía con la canción… Cuando hicimos la canción estábamos en vivo para la televisión, él solo se perdió en las últimas líneas, no pudo terminar”.
Hay más similitudes en estos trágicos desenlaces; los dos eran grandes amigos, inclusive Chester era el padrino del hijo de Chris Cornell. Ambos sufrían de depresión y habían recibido tratamiento médico. Cuando decidieron quitarse la vida los dos estaban de gira, así que nadie pudo sospechar un final tan dramático. Cornell había cantado con Soundgarden justo la noche misma de su suicidio, y Bennington había actuado con Linkin Park el 22 de junio en España y tenían previsto continuar la gira el 27 de julio en Estados Unidos.
Al principio pareció solo un detalle, ignorado por muchos, pero ahora tanto fans, como compañeros, familiares y amigos recuerdan la carta que escribió Chester cuando Cornell se despidió de la vida:
“Soñé con los Beatles anoche. Desperté con el tema Rocky Raccoon sonando en mi cabeza y una cara de preocupación de mi esposa. Ella me dijo que mi amigo había muerto. Pensamientos de él inundaron mi cabeza y lloré. Aún lloro, con tristeza, así como con gratitud por haber compartido momentos tan especiales contigo y tu hermosa familia. Me has inspirado de muchas formas que nunca pudiste saber. Tu talento era puro y sin rivales. Tu voz era placer y dolor, ira y perdón, amor y dolor al corazón, todo en uno. Supongo que eso es lo que todos somos. Me ayudaste a entender eso.
Acabo de ver un vídeo tuyo cantando A day in the life, de los Beatles, y pensé en mi sueño. Me gustaría pensar que estás diciendo adiós a tu manera. No puedo imaginar un mundo sin ti en él. Rezo para que encuentres paz en la otra vida. Envío mi amor a tu esposa e hijos, amigos y familia. Gracias por permitirme ser parte de tu vida«.
Estos dos ídolos caídos actuaron juntos en el escenario en más de una oportunidad, siendo muy recordado cuando compartieron gira en 2008 y en algunas fechas, Cornell invitaba al escenario a Bennington para cantar a dúo el tema Hunger strike, que aparece en el disco de Temple of The Dog, la otra banda de Cornell, en la que también grabó Eddie Vedder de Pearl Jam.
Además de Linkin Park, Bennington también cantó en Death By Sunrise y desarrolló una carrera alterna como actor. Tenía apenas 41 años y dejó seis hijos. También es triste que Linkin Park había publicado hace tres meses su nuevo disco titulado One More Light (2017), cuya carátula fue lanzada digitalmente como una especie de rompecabezas y que además había obtenido notable éxito de ventas, así como reseñas muy positivas por parte de la crítica.
Por: Roberto C. Palmitesta R.
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