- Sons of Apollo “Psychotic Symphony” (EEUU)
- Steve Hackett “The Night Siren” (Inglaterra)
- Leprous “Malina” (Noruega)
- Threshold “Legends of the shires” (Inglaterra)
- Steven Wilson “To the bone” (Inglaterra)
- Mastodon “Emperor of sand” (EEUU)
- Oceanic “Trappist” (Canadá)
- Soen “Lykaia” (Suecia)
- Tempano “Nowhere Now here” (Venezuela)
- Ayreon “The Source” (Holanda)
- Anathema “The Optimist” (Inglaterra)
- Marco Minnemann “Borrego” (Alemania)
- Gone Is Gone “Echolocation”
- Operation Mindcrime “New reality” (EEUU)
- Magenta “We are legend” (Gales)
- The Tangent “The slow rust of Forgotten” (Inglaterra-Suecia)
- Tree of life “Awakening Call” (Venezuela)
- Scale the summit “In a world of fear” (EEUU)
- Sleeping In Traffic – Feminism (Canadá)
- Kaipa “Childrens of the sounds” (Suecia)
El 2017 estuvo muy movido entre la corriente progresiva, tanto por aquellas bandas que se pliegan al prog de la escuela clásica de los años 60 y 70, como aquellas que practican la corriente moderna que acepta el metal como aliado, algo que no gusta mucho a los fans más old school, sin embargo es una realidad y hay quienes se han adaptado. Igualmente destacaron bandas con un estilo más moderno y minimalista.
Sons of Apollo debutó por la puerta grande y es que no podía esperarse menos de este super grupo liderado por dos ex – Dream Theater. ¡Qué clase de disco es este “Psychotic Symphony”! y tiene de todo un poco lo que mencioné en el primer párrafo más elementos del jazz fusión, el hard rock y el heavy neoclásico.
Steve Hackett grabó otra obra maestra con “The Night Siren”, que en un futuro pudiera posicionarse con un clásico del progresivo. Por su parte Leprous con su “Malina” siguen escalando posiciones en la escena del prog más moderno y minimalista con esta producción tan ambiciosa y llena de detalles.
Threshold con “Legends of the shires” gestó un doble larga duración llenó de música del más alto nivel, contiene tanto la vieja escuela, como también la que vino en consecuencia durante los años 80 y 90, así como los elementos más característicos del prog-metal actual.
Steven Wilson se la jugó con un disco “To the bone” arriesgado, con el cual rinde un tributo muy personal a las discos que lo influenciaron en su juventud con orientación hacia el pop, como el “So” de Peter Gabriel o “The seeds of love” de Tears for fears. Es progresivo, pero también es pop de alto nivel, reflejando la polivalencia de un artista que no cree en barreras, dando como resultado una placa muy interesante y grata de escuchar.En “Emperor of Sand” Mastodon revalida su condición como uno de los monarcas del metal progresivo, editando una vez más un álbum difícil de descifrar y catalogar. Y hablando de bandas que no creen en etiquetas ¡qué grata sorpresa representó el “Trappist”! de los canadienses Oceanic, apenas su segundo Cd de estudio que ahora les sirve de pase a las grandes ligas del prog. ¡Vaya que disco! Lleno de jazz fusión e improvisación, pero también poseen las estructuras de los King Crimson más experimentales. Todo un desborde de virtuosismo pero con un sonido vintage. Sin duda están llamados a liderar las nuevas generaciones del género.El holandés Arjen Anthony Lucassen reunió a otro all-star para la novena entrega de la ópera del metal progresivo conocida como Ayreon, esta vez con el título “The Source”, donde participan hasta 11 vocalistas invitados, junto a instrumentistas de la talla de Guthrie Govan, Paul Gilbert y Mark Kelly.