Obras de las artistas venezolanas Isabel Cisneros, Dianora Pérez, Malu Valerio y María Virginia Pineda, conforman la exposición “4 Cuartos: Una habitación propia”, que presenta actualmente Cerquone Projects en su sede de La Castellana, Caracas, con museografía de Manuel Eduardo González y Jean Carlos Leal.
“4 Cuartos: Una habitación propia” pasea al espectador por cuatro espacios que, en palabras de la investigadora de artes visuales Gabriela Mesones, nos hablan desde la nostalgia, de un mundo que reside más allá de sí mismo, de sus azotes de oscuridad, la violencia que sale de sus sombras, sus estrategias de poder y su creación de vulnerabilidad.
“Vemos acá cuatro rincones de la naturaleza vistos a través del temperamento (…) Acá hay cuatro cuartos que subrayan las atrocidades del mundo y la belleza de la destrucción. Son cuatro cuartos sin miedo ni pudor, en los que se vislumbran las migajas de algo que alguna vez estuvo vivo”, afirma Gabriela Mesones en el texto que acompaña la muestra.
Isabel Cisneros exhibe una selección de ensamblajes hechos en la oscuridad, que bajo el título Obsolescencia, se remiten a la mágica relación con la tecnología en tiempos de censura, colapso energético y economías fracturadas. “Cada pieza es una oda a la lentitud, al desgaste, a la antigüedad de las carcasas de metal con las que hacemos vida y la astucia humana impresa sobre ellas. Si la tecnología fue hecha a imagen y semejanza del hombre que la opera, poco sorprende que nuestro sistema de vida haya colapsado junto a las adquisiciones tecnológicas que nos ayudan a sobrellevarla”.
Dianora Pérez presenta una propuesta titulada Gedeón, en la que a partir de la búsqueda de sintonía con un paisaje de guerra, palabras y/o imágenes que se quedaron atrapadas en la virtualidad, muestra una serie de grabados que corresponden al último mensaje de voz transmitido por las siete víctimas de la masacre del Junquito, según se desprende del texto de Gabriela Mesones. “Cada grabado retrata un fragmento de vida, y con ellos, preguntas en torno a la transmutación de la muerte y su encuentro con el espíritu humano, aunque inquebrantable, finito, vulnerable, en busca de una última conexión humana antes de la despedida”.
Malu Valerio expone una instalación titulada Morada, en la que aborda la violencia contenida en los procesos domésticos, a través de multiformatos que se enfocan en la vida de uno de los casos de violencia de género más desgarradores de la historia contemporánea venezolana, como es el de Linda Loaiza. Según describe Mesones, “en esta instalación podemos hurgar, poco a poco, en la ruptura de identidad. En esta habitación no se aceptan espectadores, solo investigadores latentes de mirada fija en las dinámicas de abuso detrás de la violencia física, estatal, policial y mediática que conforman las jerarquías de poder a través del género. Morada es un océano de tela y violencia, pero también es un susurro de fuerza oculta y búsqueda de sosiego”.
María Virginia Pineda participa en la muestra con Paisaje a Máquina, donde “habla desde la descripción para encarar la historia y su aproximación al género. Se recurre al arte como pensamiento, a un mundo sin color, imagen o sensación, a un universo de palabra y razón, que nos remite a las posibilidades ocultas del alma. Sin embargo, la pulsión a la razón deja un vacío, la nostalgia por el sentir nos remite a otro abismo, a un universo sin alma ni suelo, a un alma sin carne ni sangre”.
El público podrá apreciar la obra de estas cuatro artistas en la exposición “4 Cuartos: Una habitación propia”, que se estará presentando hasta finales de mayo de 2019, en los espacios de la galería Cerquone Projects, ubicada en la avenida San Felipe de La Castellana, quinta 117, Caracas. El horario es de martes a viernes de 10 am a 6 pm, sábados y domingos de 11 am a 5 pm. La entrada es libre.
Mayor información puede ser solicitada por www.cerquone.com Facebook: CerquoneProjects e Instagram: @cerquoneprojects Teléfono 0424-6019251