Si hubo fraude, ¿Por qué no se ha denunciado con fuerza? ¿Por qué tantos dirigentes tratan de bajarle el volumen? ¿En donde estan los candidatos víctimas de fraude denunciando y peleando por el respeto de la voluntad de los venezolanos? ¿Son sólo Andrés Velasquez y unos pocos más los que están peleando?

Hay dirigentes a quienes les preguntan por el fraude y responden hablando de la abstención. Ya sabemos que hubo abstención! ¿Acaso la abstención borra el fraude? ¿Son excluyentes abstención y fraude?

Obviamente no, más bien son complementarios en el plan del gobierno.

No sólo no son excluyentes, sino que en algunos casos la abstención es, incluso, consecuencia directa del fraude (cierre y traslado de centros electorales a última hora, por ejemplo).

Los dirigentes opositores tenemos que reclamar la abstención y el fraude, en vez de hablar de abstención y hacernos los locos con el fraude.

Si las elecciones no fueron fraudulentas entonces es forzoso concluir que fueron transparentes porque aquí no caben términos medios: no pueden haber sido «medio transparentes» o «medio fraudulentas». O las elecciones respetaron y reflejaron la decisión de los electores, o no. Es inadmisible la ambigüedad en la que algunos pretenden moverse.

Si reconocemos el proceso como válido y transparente, o no-fraudulento pues, ¿tiene algún motivo o razón el gobierno para abstenerse de volver a jugar con candidatos y tarjetas opositoras, o para volver a abusar en todos los sentidos, o para volver a cerrar y migrar centros tres dias antes de las elecciones? O, más bien, ¿no tendrá ahora mayores incentivos para hacerlo sabiéndose impune?

Si la MUD emitió un comunicado denunciando el fraude, ¿por qué hay actores fundamentales de la MUD que lo niegan o que no lo reconocen? ¿A qué juegan? ¿Es sólo para cuidar a toda costa nuestras posibilidades de participar en las elecciones municipales y presidenciales?

Un respetado amigo, Enrique Ochoa Antich‏, afirma que «fraude no hubo. Otra cosa es un proceso fraudulento debido a atropellos y abusos de poder.» Y yo, incapaz de comprender eso, me pregunto cómo «un proceso (electoral) fraudulento debido a atropellos y abusos de poder» pudo producir resultados electorales transparentes, o no fraudulentos. Estoy seguro de que Enrique tiene alguna explicación, porque él es una persona muy racional, pero yo no entiendo.

Si todo lo que ocurrió no califica como fraude, ¿qué tiene que pasar para que efectivamente si califique como fraude? Es requisito indispensable que los votos de las urnas electorales contados manualmente NO coincidan con los resultados arrojados por las máquinas para que se pueda hablar de fraude?

En este caso, por ejemplo, al régimen le bastará con cerrar más centros electorales en donde la oposición es amplia mayoría para garantizar victorias eternas y «sin fraude».

El régimen le acaba de robar las elecciones a los guayaneses!

¿Qué le decimos a ellos y a Andrés Velasquez, que pasó 48 horas protestando con las actas en la mano mientras el CNE inexplicablemente no publicaba los resultados?

Otro tema. Henry Ramos Allup, una de las voces más combativas de la oposición, dice que es una «decisión personal» de cada gobernador electo ir o no a juramentarse ante la fraudulenta asamblea nacional constituyente.

Hasta ayer la llamaba «prostituyente». ¿Dejó de serlo? ¿Se legitimó?

El jefe de campaña, Gerardo Blyde, dijo a los venezolanos la semana pasada, en nombre de la Unidad, que nuestros gobernadores no irían a juramentarse ante la fraudulenta constituyente. Y entonces, ¿Ahora queda a criterio de cada quien? (de ninguna manera estoy culpando a Gerardo, cuya seriedad reconozco).

¿Puede justificarse como «decisión personal» que un gobernador electo con los votos de la Unidad viole la constitución?

Ahora que el gobierno convoque las elecciones municipales, ¿con qué argumentos vamos a motivar a la gente a participar? ¿Cómo convencerlos de que votando avanzamos hacia el Cambio en vez de ayudar al régimen? ¿Cómo convencerlos de que las trampas y abusos del régimen que vicien el proceso serán evitadas, impedidas, o al menos denunciadas?

Coherencia amigos, nos hace falta coherencia entre el verbo y la acción. Coherencia es una palabra que utilizaré mucho de ahora en adelante.

Disculpen lo largo de mis tips de hoy. Me despido agradeciendo a Fernando Del Rincón y a CNNE por la entrevista del lunes en la noche, en donde compartimos con nuestro amigo Vladimir Villegas. Aquí el enlace: https://youtu.be/CM3ZgGP4-6Q

Ramon Muchacho